Concretamente tú, que vas medio flotando por la vida, llena de alegría, de color, de luz, de sensaciones románticas y de belleza a dos palmos del suelo. Estás viviendo lo que se suele llamar la época del enamoramiento, donde todo es maravilloso, la vida es bella y tu pareja recién estrenada es todo lo que querías sin buscarlo, no entiendes cómo has podido vivir hasta el día de hoy con las manos vacías y no te imaginas un minuto del día sin él.

Es probable que no seas consciente de que esto es sólo una etapa, y que pasará.

Si no quieres que se te vaya la cabeza hasta límites insospechados y deseas vivir tu relación sin hacer el ridículo de cara a los demás y sin sufrir cuando te caigas de la nube, este post es para ti.

Es un proceso natural pero caduco

Esto no quiere decir que no vayas a vivir enamorada de tu pareja después, pero lo que debes tener en cuenta es que la sensación de vivir a tres metros sobre el cielo como la película, tiene fecha de caducidad. Es natural, es lógico, a todo el mundo le pasa y no tiene por qué suponer ningún problema, palabra.

Pon los pies en el suelo

Y con esto queremos decir que no idealices a tu pareja, esa a la que ves absolutamente perfecta como un ángel. Tiene defectos, se equivoca y no siempre tendrá la razón o dirá las cosas brillantes que está soltando por la boca de momento. Discutiréis como todo el mundo e incluso en alguna ocasión os enfadaréis de verdad, pero eso no tiene nada que ver con el amor.

Cuidado con las amistades

Sí, esa gente que te rodeaba hasta que encontraste a tu media naranja. Se merecen atención, aunque no estés para ellos de momento.

Fuente: Nosotras

RA