Desayunar con granola es una muy buena manera de comenzar la jornada con toda la energía. Sin embargo, no suele ser lo más económico. Para que puedas ahorrar y tengas siempre una deliciosa granola en tu día a día:
Ingredientes
3 tazas de avena arrollada (no la instantánea)
3 cucharadas de azúcar moreno
½ cucharadita de canela molida
¼ de cucharadita de sal
⅓ de taza de miel
¼ de taza de aceite vegetal
1 cucharadita de esencia de vainilla
½ taza de fruta seca cortada en dados pequeños
½ taza de nueces o semillas crudas o tostadas (como más te guste).
Preparación
Precalienta el horno a temperatura suave (150 ºC – 300 °F) y pon la rejilla en el medio.
En un bol grande coloca la avena arrollada, el azúcar moreno, la canela y la sal.
Mezcla todo muy bien y reserva.
En un bol pequeño, coloca la miel, el aceite y la esencia de vainilla.
Revuelve muy bien hasta obtener un líquido homogéneo.
Con mucho cuidado, vierte esta mezcla sobre la avena y revuelve hasta cubrir los ingredientes secos por completo.
Extiende la mezcla en una capa fina y pareja sobre una bandeja para el horno que tenga borde alto.
Cocina la granola por 15 minutos.
Retira del horno, mezcla bien y continúa la cocción hasta que la granola esté dorada, es decir, entre 5 y 15 minutos más.
Retira la bandeja del horno y ponla sobre una rejilla para que se enfríe.
Revuelve ocasionalmente durante unos 20 minutos. Notarás que la granola se pone cada vez más dura a medida que se enfría.
Finalmente, añade las frutas y las nueces o semillas a la bandeja para hornear y mezcla bien para combinar. Guarda la granola casera en un recipiente hermético. Puedes conservarla hasta por 2 semanas.
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Fuente: vix / MF
Source: Informe21