Hace 309 años el milagro de la Chinita sigue intacto en una tablita y en un pueblo
Entre marullo y marullo del Lago de Maracaibo llegó hasta las orillas del estuario zuliano una tablita, que recogió una anciana llamada María Cárdenas, quien cumplía su labor de lavado de ropa ajena. María pensó que esa pequeña tabla le serviría para tapar la tinaja de agua que tenía en su casa, pero al limpiarla notó una imagen que asoció con símbolos religiosos, lo cual le apareció hermoso. Decidió entonces la anciana colgar en una de las paredes de su humilde aposento el cuadrito borroso, pero bello para ella. Era el viernes 18 de noviembre de 1709 cuando, quizás entretenida en sus quehaceres de laMostrar más