El derbi de los Hernández

El derbi de los Hernández

EFE

El derbi madrileño que disputarán el próximo sábado el Atlético de Madrid y el Real Madrid, el primero del estadio Wanda Metropolitano, será también el primer derbi que enfrentará a los hermanos Hernández, Lucas y Theo, uno en cada equipo desde el fichaje de este último por el club blanco.

Los dos jóvenes defensores zurdos, Lucas (21 años, hará 22 el 14 de febrero) y Theo (20 años cumplidos el pasado 6 de octubre) vivirán el derbi de una manera inusual: una pareja de hermanos ubicados cada uno en uno de los contendientes de la rivalidad ciudadana entre rojiblancos y madridistas.

No hace mucho tiempo compartían ambos los mismos colores. Los del Atlético de Madrid, a cuya cantera llegaron de forma simultánea en el año 2006, con una curiosa anécdota que reveló Lucas hace cuatro años.

«Mi hermano iba a hacer la prueba en Orcasitas para el Atlético Madrileño Alevín, me puse a jugar con el hermano de un amigo de mi hermano y uno de los técnicos del Atlético de Madrid me dijo que querían verme en un partido con mi equipo, el Rayo Majadahonda. Me vieron y me ficharon», explicó Lucas a la web del Atlético en 2013, cuando vivió su primera convocatoria con el primer equipo.

Desde aquella prueba en Orcasitas (en el barrio madrileño de Usera, en la zona sur de la capital), Lucas y Theo desarrollaron una carrera en paralelo desde las categorías alevines del club rojiblanco, progresando y explotando hasta las categorías juveniles, momento clave desde el que dieron el paso al profesionalismo.

Lo dio Lucas en 2013, cuando pasó del equipo juvenil División de Honor a su primera convocatoria del primer equipo, un 9 de noviembre para un partido de Liga contra el Villarreal, debido a las ausencias de los uruguayos Diego Godín y José María Giménez (disputaban el partido para la repesca del Mundial 2014) y la lesión del brasileño Filipe Luis.

Aunque formó parte de varias convocatorias esa temporada, su alternativa con el primer equipo en partido oficial llegó un año y un mes después, en el cruce de la Copa del Rey 2014-15 contra el Hospitalet, contra el que disputó ida y vuelta, ambos partidos completos y como central izquierdo.

No obstante, donde Lucas sorprendió a propios y extraños no fue en el centro de la zaga, sino como lateral izquierdo, donde fue ubicado por el entrenador argentino Diego Pablo Simeone por sorpresa en el derbi de ida de octavos de Copa del Rey contra el Real Madrid en el Vicente Calderón, con victoria final rojiblanca por 2-0 y un gran partido de Lucas.

A partir de aquella temporada, su peso en el vestuario rojiblanco fue creciendo y también el reconocimiento de Simeone, que ha destacado el trabajo de Lucas, pese a haber tenido «la fortuna y la dificultad de tener grandes centrales alrededor suyo», dijo de él en abril de 2016. Esta temporada es uno de los ejemplos recurrentes del técnico en cuanto a jugadores que están creciendo en el equipo.

También como juvenil fue el gran salto de Theo, no al primer equipo pero sí a los ojos y oídos de los seguidores rojiblancos, cuando fue clave en el Atlético Juvenil que logró un doblete de Liga y Copa en la temporada 2015-16, un torneo copero que ganaron por 3-4 al Real Madrid, en el que estaba el marroquí Achraf Hakimi, hoy compañero de Theo en el primer equipo blanco.

La temporada siguiente el potente lateral izquierdo galo alternó el filial de Tercera División con los llamamientos de Simeone para completar entrenamientos y alguna convocatoria, aunque sin oportunidades de debutar con el plantel en partido oficial, lo que le llevó a buscar minutos en el Alavés.

En Vitoria confirmó las buenas hechuras que apuntaba en la cantera rojiblanca, no juntó en el duelo de la primera jornada en el Vicente Calderón, pero sí recibió al equipo que le formó en Mendizorroza, un 28 de enero, con empate 0-0 e incursiones constantes al ataque por su banda zurda.

Regresó al Calderón para disputar la final de la Copa del Rey con el conjunto vitoriano, en la que marcó un gol de falta directa, que supuso el 1-1 tres minutos después del tanto inaugural de Lionel Messi, en una final que desequilibraron para los azulgrana el brasileño Neymar Junior y Paco Alcácer.

Su buena temporada llamó la atención del Real Madrid, con el que unos días antes de la final copera pasó reconocimiento médico. Un traspaso que el propio jugador desveló a finales del pasado mes de junio al definir como «un sueño» jugar en el club blanco.

Source: Meridiano