El abuso de antibióticos causará 2,4 millones de muertes hasta 2050

El abuso de antibióticos causará 2,4 millones de muertes hasta 2050

Puede que los antibióticos dejen de ser la solución a nuestros problemas. Ese es el mensaje de alerta que lanzó ayer la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Según un estudio encargado por este organismo, la resistencia bacteriana –un fenómeno con un expansión inquietante, en buena parte debido al uso inadecuado de los antibióticos– podría causar 2,5 millones de muertes en los países miembros hasta 2050. En términos económicos, el impacto de esta problemática podría acarrear pérdidas de hasta 3.500 millones de dólares –algo más de 3.000 millones de euros– al año.

Pero es un mal que podría tener solución. ¿Cómo? De acuerdo a los expertos, lo ideal sería poner en marcha una estrategia basada en cinco frentes y que tendría un coste de menos de dos euros por habitante: la mejora de higiene en los centros sanitarios con el fomento del lavado de manos; la concienciación sobre el uso racional de los antibióticos para poner fin a décadas de «prescripción excesiva»; el uso de pruebas de diagnóstico rápido para predeterminar si una infección es bacteriana o vírica; el fomento de la «prescripción diferida» –instruir al paciente para que tome el medicamente solo si empeora o sus síntomas no mejoran–; y la creación de campañas públicas de sensibilización.

Según la OCDE, hay países que sufrirán más esta causa. En concreto, la mayor parte del problema está en el sur de Europa. Italia, con 18,17 fallecimientos anuales por cada mil habitantes, encabeza la lista. Le siguen Grecia con 14,79, Portugal con 11,34 y Francia con 8,61. España se sitúa muy lejos de estas cifras con una media estimada de 3,95 muertes por cada mil habitantes. En total, son unos 1.835 fallecimientos al año por esta causa.

Más allá del riesgo que supone para la salud, este aumento de la resistencia bacteriana conlleva un «importante impacto sobre la calidad de vida de las personas». En concreto, los más vulnerables son los menores de 12 meses y las personas mayores de 70 años.

Los más de 3.000 millones de euros de gasto que ocasiona esta circunstancia equivalen al diez por ciento de la inversión de la Unión Europea en atención sanitaria por enfermedades transmisibles. Con la campaña que sugieren los expertos de la OCDE se podrían evitar hasta 1,6 millones de fallecimientos, es decir, dos de cada tres de las muertes motivadas por este uso indebido de antibióricos. También disminuiría un 40 por ciento la carga sanitaria por complicaciones.

Source: A tu salud